"Si esperamos a encontrar un movimiento inmaculado para apoyarlo, nunca encontraremos una causa digna de nuestra pureza" Arundhati Roy

Tuesday, September 12, 2006

El caso Rubianes

Los que no tenemos prisa por pillar un puesto en el gobierno, ni salimos ganando nada, sabemos qué quería decir Rubianes. Que está hasta los huevos del tema de la unidad de España (excusa que siempre han usado las clases altas para justificar golpes de estado para asegurar sus privilegios, como se puede leer en "Bienestar insuficiente, democracia incompleta. Sobre lo que no se habla en nuestro pais" de Vicenç Navarro). Que está hasta los huevos con que desde que ha nacido le han estado (como a mi, como a todos los nacidos antes del 75) con esos temas de Estado que valen para dejar siempre a los pobres siendo pobres: la unidad de España, las autonomías, la iglesia y valores morales...

Pero claro, habrá el pretendidamente equidistante que diga: "Bueno, este señor recibe subvenciones públicas para insultar a España".

Observaciones:
Numero 1: No insulta a España. Insulta a la puta España fascista, de la que seguimos teniendo muchas muestras,... Se manifiestan el lunes delante del teatro Español,... se les puede leer en los foros de Minutodigital.com, en los de semanarioalba.com, en los de españa2000, en muchos...

Número 2: Bueno estaría que ahora los artistas, escritores, intelectuales o la gente de la calle no pudiesen meterse con España, la monarquía, la conferencia episcopal, la deficiente democracia,... El día que empecemos a poner más límites que los que existen legalmente (que ya favorecen una postura muy conservadora), mal irán las cosas socialmente.

Número 3: Seguimos con el sistema feudal. Las subvenciones son para la gente que no critique ni a Dios, ni a la Patria ni al Rey. Aha,... ya se las pueden dar a la conferencia episcopal, al Opus, a las nuevas generaciones del PP, que hagan ellos las pelis, los espectáculos,...

Y sobre el argumento usado por la Marquesita Ultra: no puede usarse dinero público para criticar a España, para decir esas cosas de España.
Pues bien que ha usado ese dinero público que se le paga a toda la cohorte del Partido Popular para poner a parir a Cataluña y Euskadi, a los nacionalistas, que sí, que no le gustarán, pero pagan también impuestos y son ciudadanos iguales a cualquiera... Y se sigue perpetuando la idea de que uno no se puede meter con los nacionalistas españoles pero si con los nacionalistas catalanes y vascos. O hablan todos o ninguno. Y mientras esto sea una democracia deberían hablar todos...

Ojalá llegase un día en que se dejase de dar espacio en la tele, en la radio, a las opiniones de los PPalibanes. No prohibidos, sino porque cansase oirles decir una tontería tras otra. Con la derecha del PSOE (la de El País, la que se cargó la propuesta social de Borrell) sería más que suficiente.

2 Comments:

Blogger Vicisitud y Sordidez said...

Espinoso siempre el tema de las subvenciones. ¿Hasta qué punto está el estado dispuesto a patrocinar el criticismo?

Al final, parece que la alternativa más coherente para la individualidad del artista es hallar su contrapartia en la individualidad del mecenazgo.

En última instancia, cada arte es producto de su época que, de alguna forma, lo demanda. Así, el propio público, sin subvención, podría sostener iniciativas de distinta índole.

Los coros grieogs murieron, el teatro ya no se hace en verso y el actual modelo de televisión está ya agonizando. Algunas cosas no la mantiene ni la subvención.

Y Rubianes me parece que lo mejor que hizo en su vida fue Makinavaja. 'Nuff said.

Eso sí, del cine español, del que sé un rato, habría que reformar PROFUNDAMENTE el actual sistema de subvenciones. Y, si se eliminasen de todo, casi que sería mejor que el actual estado de las cosas.

12:36 PM

 
Blogger mosca cojonera said...

Creo que se juntan muchas cosas en lo que dices.

Subvenciones: creo que convienen. La subvención privada ya existe. Los intereses privados, la publi...
Subvenciones en España: tu sabes mejor que yo si hay que cambiar el sistema. Lo que no puede ser es que se subvencione a condición de que se critique o no. Creo que todo esto viene de la ilusión del tren de los Lumiere, la gente se levantaba etc... El cine no ha cambiado nunca nada, como cine, como revolución. Para lo único que vale es para uniformizar/aculturizar, lo mismo que la tele, lo mismo que la religión.
Y sobre Pepe Rubianes, no conozco nada de su curro. Ni me molesta, ni me anima... Los que me cansan son los de siempre, diciendo lo de siempre.

3:52 PM

 

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